El narcotráfico es un negocio que nunca va a desaparecer; cada vez que un capo es dado de baja vienen detrás al menos 3 con su misma formación o mejor para este negocio en específico. En los viejos tiempos eran los carteles de Colombia (Medellín, Cali, Norte del Valle); en donde su figura más conocida es Pablo Emilio "El Patrón" Escobar Gaviria. Hoy en día son los carteles mexicanos (Sinaloa, Tijuana, De Juarez, Del Golfo, La Familia Michoacana, Los Zetas); en donde su figura es Joaquín "El Chapo" Guzmán.
La opción de despenalizar el consumo de marihuana en ciertos países es una medida que no va a favorecer en su totalidad a la guerra contra el narcotráfico; existen cualquier cantidad de drogas de más peso que son en las que los carteles se basan para hacer su fortuna. El negocio siempre va a ser lucrativo en alguna parte del mundo; a no ser de que legalicen todas las drogas a nivel mundial. Su ilegalidad es lo que le da valor debido a que se ocupan de muchas manos para pasar el producto a escondidas por todo el planeta Tierra.
Cabe la posibilidad que la pobreza o pobreza extrema forme parte de la decisión que toma un narcotraficante para salir adelante económica; sin embargo, esto no es una excusa para tomar ese camino que personalmente considero incorrecto. Legalizar la droga en general sería una opción para eliminar el narcotráfico pero no es viable; esto conllevaría una libertad en el consumo de la misma y a su vez en una inversión mayor en la salud mundial.
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